El 9 de abril se ha estrenado El don de Alba, mi trabajo más reciente como director de fotografía. La serie, con elementos de género fantástico, misterio, drama y comedia romántica, es una adaptación de Ghost Whisperer (Entre fantasmas), con producción de TV Group Digital Iberia para Disney y Telecinco.
Este proyecto me llega cuando todavía estaba trabajando en Tierra de lobos compartiendo la dirección de fotografía con Johnny Yebra. Fue él precisamente quien me planteó, junto a David Jareño, la posibilidad de hacer la fotografía para un remake que venía de Disney. A él le resultaba complicado aceptar el proyecto porque continuaba más capítulos en la serie Tierra de lobos. En los últimos años hemos colaborado juntos y por mi parte solo hay agradecimiento a todo su apoyo. Tras la reunión con los productores de El don de Alba, Patricio Rabuffetti y Pablo Bossi, el productor ejecutivo, Beda Do Campo, y el director de producción, Félix Rodríguez, decidieron que llevara la dirección de fotografía, y yo acepté encantado, por supuesto.
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Además del rodaje en plató hubo muchas y muy variadas localizaciones en El Escorial, Navalcarnero, Pozuelo, Majadahonda, Colmenar del Arroyo,... siempre dentro de la Comunidad de Madrid, salvo contadas excepciones como, por ejemplo, San Rafael en Segovia.
La serie se está emitiendo los martes a las 22:30 horas en Telecinco. Y creo que también los domingos noche en Divinity. Además, los capítulos pueden verse en la web de El don de Alba.
la fotografía
El don de Alba se plantea como una serie de Disney, por lo que la imagen venía ya bastante definida. Tampoco se trataba de recrear Entre fantasmas, la versión original, porque si bien es verdad que tenía mucha calidad, ese tipo de imagen quedaba un pelín antigua. Así que partiendo de esto y teniendo en cuenta algunas pautas que me marcaron desde Telecinco, tocaba definir la línea visual a desarrollar.
Las premisas que he seguido para la fotografía de El don de Alba son una imagen colorista, acorde con el "mundo Disney", pero con contraste, y que tuviera mucho brillo, con el retrato muy cuidado. He buscado una imagen muy limpia, y siempre apuntando a conseguir la máxima calidad posible.
Esta sería la línea base para la imagen, y dependiendo de cómo se iba desarrollando la trama, algo fundamental en cualquier producto porque el guión nos marca la foto como lo marca todo, fui adaptando la fotografía y variando un poco las claves. La serie empieza "arriba", en ese sentido colorista, y termina "abajo", un poco más oscura, menos brillante, porque también la historia va dramatizándose.
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Entrando un poco más en detalle, podríamos identificar cuatro mundos distintos en el guión de El don de Alba. Cada uno tiene un tratamiento diferente en la fotografía.
- las vidas en el pueblo, donde se marca más el mundo colorista, la línea base de la serie.
- el tratamiento de los casos autoconclusivos de cada capitular, que tenía mucho que ver con el desarrollo de la serie pero también me marcaban las localizaciones, que solían ser naturales.
- los momentos flashback, que tienen un tratamiento más distorsionado, con desenfoques, con saturación de color, con glows en las luces altas, buscando esa sensación de recuerdo pero también siguiendo un poco la línea colorista
- el mundo de la arboleda donde sí voy a todo lo contrario: desaturé radicalmente, contrasté mucho más todavía, hice un mundo más apagado, una imagen más 'gris', porque es el mundo contrario a la luz, donde van las almas que no encuentran su vía de escape, van hacia este mundo oscuro, sin color, sin luz, un mundo de nieblas. Este mismo tratamiento también sirve para las apariciones del Hombre sin rostro.
la calidad y la Arri Alexa
Para conseguir la máxima calidad posible, con los tiempos tan cortos con los que hoy se rueda en televisión, para mí fue clave trazar un diseño en la parte técnica, estar rodeado de un equipo de directores, productores y equipo técnico con los que puedas trabajar en sintonía, y apoyarme en esa gran maravilla que se llama Arri Alexa. Sin esta cámara, no sé cómo podríamos conseguir los niveles de calidad que conseguimos en tiempos récord.
La Arri Alexa tiene una latitud tremenda, tanto en la respuesta en las luces altas como en las bajas, y eso te da mucha confianza y permite que te preocupes más del estilo que quieres conseguir que de las pautas técnicas. Es un soporte muy fiable con el que ya estaba habituado a trabajar.
Victor Tejedor (DoP) y Joaquín Bernal (foquista) |
Además conté con un equipo de personal de cámara auténticamente maravilloso, capaz de optimizar resultados contrarreloj, sabiendo qué niveles de calidad queríamos conseguir y qué tiempos teníamos. En mi equipo estaban Víctor Ramírez con la steady y Arturo Hernández en la otra cámara. Como foquistas, Joaquín Bernal, Miguel Carreira (habituales de mi equipo) y Jon Peter Rowing. Xoan Feros era el DIT, que me apoyó en los etalonajes, Federico Oliver, videoassist, con quien no falló nunca la señal, los auxiliares Mikel y Raúl, la meritoria de cámara Inés,... y los que nos apoyaron en las ocasiones que estuvieron.
Víctor Tejedor (DoP) con la Arri Alexa y croma |
El equipo de iluminación lo suministró Southern Sun y el equipo de eléctricos fueron José Luis, Pepe, Fernando, Javi,...
En El don de Alba había muchos efectos digitales que se trabajaron con fondos de croma. Aunque esto es complicado contamos con la empresa Área51 y al rodaje venía Fendu, que buscó la forma más sencilla y rápida de conseguir rodar los efectos, consciente también de la calidad que había que dar. Para los efectos especiales contamos con Reyes Abades, que con su sabiduría y eficacia consiguieron resultados fantásticos y de paso una gran ayuda para engrandecer la imagen.
En etalonaje, aunque la serie ya venía marcada de rodaje, contrastamos bastante y afinamos en los tonos más adecuados. Jaime Climent, responsable del etalonaje, entendió perfectamente lo que yo quería lograr. Matizamos y encontramos el punto que más nos interesaba para conseguir el resultado deseado.
Por ejemplo, aunque tiramos de tonos cálidos y de naranjas en las noches, en etalonaje, se reforzaba más el naranja o el amarillo dependiendo de si eran interiores o exteriores, luz de lámparas o de farola... así cada detalle. Y siempre buscando en la imagen esa limpieza característica de mi foto.
Un regalo para este trabajo es que antes de su estreno en España, Sony Entertainment Television ya había adquirido los derechos de emisión de El don de Alba, lo que significa que la serie llegará también al público de Latinoamérica, y además, se verá en su versión original!